MONTMARTRE: 10 cosas que hacer en el barrio bohemio de París

Montmartre es un barrio del distrito 18 en el norte de la ciudad de París, la capital de Francia.

En el pasado, este bello barrio fue en realidad un municipio vecino de París hasta 1860. En ese año, una ley de ampliación de la ciudad de París convirtió a Montmartre en un nuevo barrio de la ciudad.

El encanto y el ambiente de pueblo hacen de Montmartre uno de los barrios más visitados y preferidos por los turistas.

Es una zona muy animada, llena de pequeñas tiendas, cafés, restaurantes y muchos artistas… Disfrutarás de sus bonitas calles empedradas, así como de las hermosas casas y vistas que la rodean.

Esta zona alberga la colina de Montmartre, donde se encuentra el Sacré Coeur, que está a 130 metros de altitud. Por lo tanto, ofrece muchas vistas increíbles de la ciudad que no deben perderse.

Si te apetece tener una primera impresión de Montmartre a través de un free tour, en este enlace puedes reservar uno muy recomendable. Aunque, si vas a visitar Montmartre en familia te aconsejo este otro tour familiar por Montmartre, especialmente diseñado para familias con niños.

Por eso, aquí está mi selección de las 10 cosas que hay que ver y hacer si se visita Montmartre.

Las 10 mejores cosas que ver y hacer en Montmartre

Visitar la Basílica del Sagrado Corazón – Basilique du Sacré-Coeur

Estás obligado a detenerte un momento frente a este magnífico edificio religioso que es la Basílica del Sagrado Corazón. Es el segundo edificio religioso más visitado de París después de la catedral de Notre-Dame.

La construcción del edificio comenzó en 1875 y se terminó oficialmente en 1923. Su estilo es ecléctico, tomando prestada su arquitectura de diferentes estilos como el románico y el bizantino. Su forma y su color blanco también le confieren todo su encanto, en particular por el uso del travertino, una roca naturalmente blanca.

Te aconsejo visitar el interior de la basílica, que es gratuito, para admirar su belleza y su famoso mosaico, el más grande de Francia. Si te gusta el arte y la historia merece la pena reservar una visita guiada por el Sacré Coeur.

Desde la plaza frente a la basílica, la vista es espléndida. Te permite admirar una panorámica de 180° de los tejados de París, e incluso puedes ver algunos monumentos famosos en el fondo, es el momento de intentar reconocerlos. Suele haber mucha gente, pero no sólo turistas. Es el lugar de los parisinos para pasar un buen rato en una zona emblemática, con una magnífica vista de la capital.

Al pie de la escalinata que lleva a la basílica, en la plaza Louise Michel, hay un precioso carrusel que también merece la pena fotografiar.

Descubrir uno de los cabarets del barrio

El barrio es conocido por su animada vida diurna, pero sobre todo nocturna, gracias a los numerosos bares, salas de conciertos y cabarets. Así que, cuando caiga la noche, es el momento de pasarse por uno de los famosos cabarets para descubrir el mítico ambiente de la noche de Montmartre.

Moulin Rouge

El más famoso del mundo en la actualidad es, sin duda, el Moulin Rouge. Situado en el bulevar de Clichy, este cabaret fue inaugurado en 1889 por su creador Joseph Oller.

Quedarás deslumbrado por la belleza de los trajes, los bailes que se ejecutan y el ambiente que se respira en el corazón de esta sala cubierta del suelo al techo de terciopelo rojo. Este estilo se inspira en el periodo de la Belle Époque de finales del siglo XIX.

En el menú, la comida típicamente francesa es excelente, mientras que el menú visual está lleno de lentejuelas, plumas, pedrería, música y, sobre todo, el famoso cancán francés. La revista «Féerie» es increíble, con 80 artistas, incluidas 60 «Doriss Girls» de todo el mundo. Una noche mágica, una verdadera experiencia parisina que siempre recordarás.

Te recomiendo encarecidamente que reserves una cena y un espectáculo en el Moulin Rouge, es imprescindible.

Au Lapin Agile

También se encuentra el Lapin Agile al otro lado del distrito. Verdadero emblema del barrio, a menudo es fotografiado por su bonita fachada bajo las viñas del «clos de Montmartre».

Este cabaret es el más antiguo del distrito, abierto en 1880. En su día fue un lugar de encuentro para los artistas locales, pero sigue siendo un auténtico cabaret. El público participa en el ambiente cantando y la atmósfera se vuelve rápidamente muy cálida y amistosa. Un grupo de cantantes y músicos excepcionales y apasionados, que ofrecen canciones del pasado, reviviendo el patrimonio francés. Pasarás un buen rato, más asequible que su vecino el Moulin Rouge, pero igual de agradable.

Observar a los artistas en la Place du Tertre

En este lugar es el momento de apreciar y observar el trabajo de los pintores callejeros.

A pocos pasos de la basílica del Sacré Coeur, en lo alto del barrio, la plaza del Tertre está llena de artistas de todo tipo que intentan vender sus obras y trabajan en plena calle. Esta pequeña plaza está muy animada con todos sus músicos y pintores de talento. Nos encanta el ambiente de pueblo de este lugar, es un verdadero símbolo de París.

Muchos de estos artistas se acercan a los turistas para animarles a posar para un retrato. Todos los estilos están presentes, caricaturas, realistas, blanco y negro… Aquí encontrarás tu felicidad si buscas un pequeño recuerdo para llevar a casa. Alrededor de la plaza también encontrarás multitud de cafés, restaurantes y tiendas de recuerdos.

Antiguamente era la plaza principal del antiguo pueblo de Montmartre, donde se reunían los artistas, sobre todo en el siglo XIX. En esta zona han vivido muchos pintores, como Picasso y Van Gogh, pero también artistas como Édith Piaf y Émile Zola. Hoy acoge a artistas que te muestran sus obras y las crean ante tus ojos.

No olvides buscar un pintor o dibujante que te guste y traerte tu retrato más bonito. ¡Un recuerdo único y original made in Paris!

Y si disfrutas con el street art no te pierdas un tour de arte callejero por el barrio de Montmartre, de la mano de un artista. Puedes reservarlo desde aquí.

Disfrutar de un momento cultural en uno de los museos del distrito

Naturalmente, hay varios museos en este barrio de artistas.

Museo de Montmartre

En primer lugar, recomiendo el Museo de Montmartre, inaugurado en 1960. Se encuentra a pocos metros de la Place du Tertre y del Sacré Coeur. Este museo cuenta la historia de Montmartre a través del arte, ofreciendo numerosas colecciones de pinturas, carteles y dibujos, así como exposiciones temporales de artistas renovadas regularmente.

Este lugar está lleno de historia ya que muchos artistas trabajaron en esta casa «La maison du Bel Air«, como Auguste Renoir, Charles Camoin, Suzanne Valadon y muchos otros. Construido en el siglo XVII, es uno de los edificios más antiguos de la Butte.

También podrás disfrutar de la belleza de los jardines Renoir, en memoria de Auguste Renoir, uno de los pintores franceses más famosos de la década de 1880. Se organizan regularmente talleres para niños en el museo y en el jardín, así como veladas musicales. Abierto todos los días excepto el martes (12, rue Cortot).

Si quieres asegurarte la entrada al Museo de Montmartre y sus jardines, te aconsejo comprarla online anticipadamente.

Espace Dalí París

Por último, puedes visitar el Espace Dalí París, un museo en homenaje a Salvador Dalí, famoso artista del movimiento surrealista español. El museo es bastante reciente, ya que se inauguró en 1991. Este lugar ofrece una exposición de una colección privada del artista con más de 300 obras originales de la colección Universo Dalí, en particular, esculturas y grabados.

Infórmate antes de tu visita, ya que regularmente se celebran eventos y exposiciones temporales en el corazón del museo. Abierto todos los días (11, rue Poulbot).

Buscar personalidades que vivieron en Montmartre

Montmartre es uno de los barrios más lindos de París. No te sorprenderá saber que muchas personalidades francesas han vivido allí y que otras siguen viniendo, así que mantén los ojos abiertos…

Después de pasar un rato en el entorno del artista Salvador Dalí en su museo, por desgracia, el lugar ideal para ver los nombres de otras personalidades es el cementerio de Montmartre, clasificado como monumento histórico. Sin embargo, puede ser una parada muy reparadora después del ajetreo de las calles turísticas. (No dudes en coger un mapa del cementerio con los nombres de las personalidades, para buscar sólo a los que conoces).

En una superficie de 11 hectáreas repletas de árboles, muchas personalidades descansan en este cementerio para la eternidad, como Emile Zola, Stendhal, Michel Berger, France Gall, o incluso Dalida, el gran icono de la canción francesa con un destino trágico, cuya tumba es el monumento más florido del cementerio. Si eres como yo y te gusta ella, puedes incluso admirar la casa donde vivió, está en el 11 bis de la rue d’Orchampt. Se encuentra al final de esta calle, en esta mansión de estilo 1900 con aspecto de pequeño castillo, donde Dalida vivió parte de su vida hasta su muerte en 1987.

Dalida es un verdadero icono de la zona, situada al final de la bonita Rue de l’Abreuvoir, incluso se puede ver la plaza empedrada que lleva su nombre, donde se encuentra un busto de bronce de la cantante, realizado por el escultor Alain Aslan.

Estos lugares aparecen regularmente en películas y series, como Emily in Paris, donde se rodó una escena en esta plaza.

Inmortalizar el muro de los te quiero – Le Mur des je t’aime

Quizás hayas oído hablar del Pont des Arts de París, donde los enamorados solían ir a colgar un candado para celebrar su amor. Al añadir demasiado peso a la estructura del puente, el soporte de malla metálica donde se colgaban los candados fue sustituido por cristales. Así que los amantes tuvieron que encontrar un nuevo lugar y, probablemente sea éste: El muro de los te quiero (le mur des je t’aime).

Se encuentra en el romántico jardín de la plaza Jehan Rictus, plaza de las Abadesas, en pleno Montmartre. Este mural de 40 m² de la década de 2000, que contiene la palabra «Te quiero» en 250 idiomas, está firmado por Frédéric Baron y Claire Kito. Sin duda apreciarás el hecho de que, además de las lenguas comunes, también hay lenguas menos conocidas, así como lenguas regionales como el corso, el occitano, el vasco, el catalán…

Se trata de una parada inusual en tu visita al distrito, un lugar de encuentro para los amantes de todo el mundo.

Si quieres descubrir el resto de lugares románticos de Montmartre, una forma muy divertida de hacerlo es a través de un juego de exploración por el barrio, en el que tendrás que ir resolviendo pistas, guiándote por el smartphone. Si te apetece hacer algo diferente, puedes reservarlo en este enlace.

Plaza Jehan Rictus, Pl. des Abbesses

Dar un paseo en el Pequeño Tren de Montmartre y en el Funicular

Si subir las numerosas escaleras para llegar a la cima de la Butte Montmartre te asusta, no te preocupes, tienes otra opción. Puedes tomar el funicular de Montmartre.

El funicular es una especie de ascensor automatizado cuyas dos cabinas conectan la parte inferior de la colina de Montmartre con su cima, en menos de 2 minutos. El funicular actual se puso en servicio en octubre de 1991, pero sus orígenes se remontan a 1891, cuando se decidió crear un funicular. Primero impulsado por agua y luego por electricidad, transporta más de 9.000 pasajeros al día.

Para subir, hay que tomar el funicular en la estación inferior situada entre la plaza Saint-Pierre y la plaza Suzanne Valadon y para bajar, en la estación superior de la calle del Cardenal Dubois. La tarifa es muy asequible, ya que es el precio de un billete de metro, es decir, 1,90 euros.

Cuando llegues a la cima, podrás, si lo deseas, dar un paseo en el trenecito de Montmartre. Su verdadero nombre es «Le Montmartrain«, y te ofrece un paseo de 1 hora para visitar todo el barrio y ver los lugares más emblemáticos.

Los mapas del recorrido están disponibles en el sitio web del tren, pero en este trayecto podrás ver lo esencial del barrio, como el Moulin Rouge, el cementerio y el viñedo de Montmartre. El viaje de ida y vuelta de Sacré Coeur a Place Pigalle para un adulto cuesta 7 euros y para un niño 4 euros. Es una forma original de visitar Montmartre, y muy divertida para las familias con niños.

Subir las emblemáticas escaleras de la calle Foyatier

Montmartre cuenta con numerosas escaleras en todo el barrio, pero las más famosas son, sin duda, las de la Rue Foyatier, de 1867, que discurren junto al funicular de Montmartre.

La calle lleva el nombre del escultor francés Denis Foyatier, fallecido en 1863. Este será tu objetivo deportivo del día; subir los 222 escalones de piedra que se articulan en varios niveles, con un desnivel de 36 m. A lo largo de la subida, también te darás cuenta de que en esta calle no hay números en los edificios ni entradas de edificios.

Desde el número 2 de la calle André-Barsacq, te llevarán directamente a la calle Saint-Éleuthère y, sobre todo, a la cima de la colina de Montmartre, a la basílica del Sacré Cœur. Tu recompensa será la sublime vista panorámica de París, ¡después de haber subido el equivalente a 12 pisos!

Estas escaleras se han hecho muy famosas, sobre todo en muchas películas y series donde se utilizan para mostrar el encanto de las calles parisinas.

Admirar las casas y calles famosas

Una de las calles más bonitas de Montmartre es, sin duda, la Rue de L’Abreuvoir.

Está repleta de bonitas casas, incluida la Maison Rose, en el número 2. Esta pintoresca casita con su magnífica fachada es ahora un café restaurante. Es un lugar que no debes perderte en Montmartre, que ha sido inmortalizado por muchos artistas sensibles a este edificio atípico. Esta casa será el toque de alegría y originalidad en tu paseo.

A continuación, tienes que dirigirte a la plaza Marcel Aymé, para ver una curiosidad, el Passe-Muraille. Representa a un hombre que intenta salir del muro, un homenaje al escritor Marcel Aymé que vivía en la calle Jugnot, a pocos pasos. Esta escultura de bronce bastante inusual fue creada por Jean Marais, actor, escritor y escultor en 1989.

Desde allí, toma la avenida Junot y gira en una calle escondida de Montmartre, un pequeño callejón sin salida llamado Villa Léandre. Admira las casitas de muñecas con su variada arquitectura. Este lugar es muy tranquilo, estás alejado del circuito turístico de Montmartre, por lo que encontrarás poca gente y ningún coche. Es muy bonito.

Por último, vuelve a bajar por la avenida Junot y dirígete a la Rue Lepic para admirar el famoso Moulin de la Galette.

Este atípico lugar, clasificado como monumento histórico, fue una popular guinguette parisina (merenderos o tabernas de París) y se convirtió en un delicioso restaurante en los años 80. Representa el último molino de la Butte en funcionamiento.

Contemplar los increíbles viñedos en el corazón de Montmartre

Puede parecer muy sorprendente hablar de viñas cuando se habla de un barrio de París, ¡pero es la realidad!

Llamadas oficialmente «le clos de Montmartre«, estas viñas están situadas entre el cabaret «Au Lapin Agile» y el museo de Montmartre, en el lado norte de la Butte de Montmartre. Cuando Montmartre era todavía un pequeño pueblo, alejado de París, sus habitantes eran en su mayoría agricultores y cultivaban la viña.

Cuando Montmartre se convirtió en un barrio de París, se conservaron algunos viñedos para mantener el alma del antiguo pueblo. La ciudad de París es propietaria de estas viñas y la producción anual es de unos 1000 a 2000 kilos.

Las pocas botellas de vino producidas se venden en subasta y el beneficio se destina a las obras sociales de la Butte. El momento más agradable para venir es durante la temporada de la vendimia, en septiembre y octubre, y especialmente en la época de la animada fiesta de la vendimia.

Mapa de lugares imprescindibles de Montmartre

¿Dónde comer en Montmartre?

✅ En el centro de Montmartre:

La bonne franquette

18 Rue Saint-Rustique

A dos pasos de la Place du Tertre, se encuentra este famoso restaurante con una decoración típicamente parisina que data del siglo XVI. Su lema » Amar, Comer, Beber y Cantar » es una buena manera de resumir este restaurante.

Dispone de 2 terrazas exteriores, muy agradables cuando hace buen tiempo, de lo contrario, el interior te seducirá igualmente gracias a su antigua decoración de Montmartre, muy cálida. La carta se compone de platos sencillos, típicamente franceses, cocinados con productos de calidad. Su especialidad es la estouffade de res con zanahorias y miel.

✅ Con una hermosa vista de París:

LouLou Montmartre

8 Rue Lamarck

El ambiente y el concepto de platos para compartir hacen que el restaurante sea muy acogedor. Te proponen muchas fórmulas, brunch, platos para compartir o no, platos únicos… También proponen varios platos vegetarianos. Los productos son locales y las bebidas son caseras, y hacen unos cócteles de la casa increíbles, los recomiendo.

No olvides reservar con antelación para tener tu mesa frente a la ventana con una magnífica vista sobre los tejados de París.

Edmond, Restaurante Panorámico del Hotel Terrass’

12 Rue Joseph de Maistre

Para llegar a este restaurante, tendrás que subir a la 7ª planta del Hotel Terrass’. Situado junto al cementerio de Montmartre, muestra una cocina muy francesa revisada y modernizada. La decoración es muy elegante y cuidada, y las vistas son impresionantes.

Puedes ir allí para comer o cenar, así como para el brunch si es domingo, o para el desayuno disponible cada mañana hasta las 10:30. El menú es bastante sencillo, pero con algo para todos los gustos. De nuevo, es mejor reservar con antelación para conseguir una buena mesa.

✅ Para llevar o para comer allí a bajo precio:

Pita París

6 Rue des Trois Frères

Este bonito restaurante, a dos pasos del Sacré Coeur, es una dirección famosa para los parisinos que disfrutan de una buena comida para llevar, mientras pasean o disfrutan de un descanso soleado frente a la Basílica. También puedes comer allí mismo, en este bonito restaurante.

Los precios son muy asequibles y la relación calidad-precio es muy buena, puedes comer por menos de 15 euros incluyendo las bebidas. Los platos están especializados en Pitas, un pan plano y redondo de origen oriental, cocinados con productos frescos y todos vegetarianos.

Birdie Num Num

91 Rue Lamarck

Excelente dirección para las comidas cocinadas con productos orgánicos y de temporada y, sobre todo, caseros. Platos buenos y generosos, para llevar o comer en este pequeño y bonito restaurante.

El plato del día, los entrantes y los platos a la carta no superan los 12 euros, por lo que aquí también se puede comer fácilmente por menos de 15 euros incluyendo las bebidas. También recomiendo sus zumos caseros de frutas o de jengibre, que son deliciosos.

¿Cómo llegar a Montmartre?

París es una ciudad muy bien comunicada, tiene una amplia oferta de medios de transporte según tus deseos. Puedes coger un taxi que te lleve al lugar exacto al que quieres ir, pero no es lo que recomiendo.

Si eres más deportista y el tiempo lo permite, también puedes ir a pie, en bicicleta o en patinete eléctrico. Hay muchos lugares donde se pueden alquilar, incluso puedes alquilar una bici online, es muy práctico en París en comparación con el coche.

Por último, lo que más recomiendo es coger el metro o el autobús. Si prefieres el metro de París, dependiendo del punto de partida, puedes elegir entre las líneas 2, 4, 12 o 13. Si prefieres desplazarte y disfrutar de las calles de París durante el trayecto, es mejor tomar el autobús. En este caso, puedes elegir entre las líneas 30, 31, 40, 54, 67, 74, 80, 85 y 95.

Descubre más información práctica para visitar París